Las escuelas católicas en Estados Unidos tienen una larga y orgullosa tradición de educar a los niños durante más de 100 años. Las escuelas católicas educan al niño “completo”. ¿Qué significa eso realmente? Significa que a los estudiantes se les enseñan materias académicas (religión, inglés, matemáticas, ciencias, etc.) y arte, música, educación física y tecnología. Pero lo más importante es que nuestros estudiantes aprenden lo que significa ser hijo o hija de Dios y miembro de la fe católica.

Como seguidores de Jesús, nuestros estudiantes comprenden que un cristiano significa aprender a ser bondadoso, respetuoso, preocupado por uno mismo y por los demás, como Jesús nos ha pedido. También significa compartir los talentos y habilidades únicos que Dios nos ha dado y hacer nuestro mejor trabajo en cada tema todos los días.  

Los estudiantes participan en las oraciones matutinas diarias, asisten y participan activamente en la Misa cada semana, se confiesan y se preparan para recibir los sacramentos. Los estudiantes también aprenden a rezar el rosario, el papel de los santos, las fiestas religiosas especiales y las devociones. La religión se enseña en todos los grados todos los días.